Todos sabemos que la masturbación es una práctica peligrosa. A fin de hacer que los jóvenes tomen consciencia de los males del pecado, es que se publicó Francia 1830 un pequeño libro que ilustra la vida de un masturbador, desde la caída en el vicio hasta el fin de sus días.
Era joven y guapo ... el orgullo de su madre
¡Se corrompió! Pronto carga con el castigo de su crimen, envejece antes de tiempo, su espalda se encorva
Un fuego devora sus entrañas; sufre horribles dolores de estómago
Mirad sus ojos, antes puros y brillantes; su brillo se ha apagado, una banda de fuego los rodea
No puede andar, sus piernas flaquean
Sueños terribles perturban su descanso; No puede dormir
Sus dientes se pudren y se caen
Le arde el pecho; tose sangre
Su antes maravilloso cabello se le cae como a un anciano, se queda calvo prematuramente
Está hambriento y quiere comer; la comida no permanece en su estómago
Su pecho se colapsa; vomita sangre
Su cuerpo entero se cubre de pústulas; es una visión horrible
Una lenta fiebre le consume, le hace languidecer, todo su cuerpo arde
Su cuerpo se agarrota completamente; sus miembros dejan de moverse
Delira, se resiste a la muerte: la muerte es más fuerte
A los 17 años expira entre horribles tormentos.