Pah, yo me "asusté" un poco hoy.
Me mandé un café con el que traje de Culto.
Antes aclaro que estoy 100% convencido de que no tengo ningún problema técnico para hacer el café.
Lleno el depósito con agua mineral caliente.
El filtro a ras, sin apretar el café.
La hornalla a gas en media, tirando a bajita.
El café lo tira suave y parejo, con un tono tipo miel bien oscura. El que tomé hoy en Culto también tenía ese tono.
Se nota que tiene su cuerpo, y no es transparente.
Por lo que vi es una extracción correcta. Según todo lo que miré (y miré mucho), parece que no hubiera por donde mejorarlo demasiado.
Además lo arranqué a tomar sin agregar azúcar, y tenía su dulzor y todo. (y nunca antes había tomado café sin azúcar. Me sorprendí gratamente de haberlo encontrado dulzón sin agregarle azúcar) . Jamás se me hubiera ocurrido que un café sin azúcar pudiese no ser asquerosamente amargo.
Parece que fuera todo perfecto.
Pues sentí que estaba tomando una especie de té. No un café!
Tenía sus tonos, ciertos aromas dulces... Pero mi idea del café no era así.
Será que estoy tan contaminado con un olor típico y único, golpe de garganta, y ahora un producto noble me parece una cosa distinta, a la cual le falta "lo de toda la vida" ?
No lo entendí, pero no lo disfruté tampoco. Lo terminé casi a la fuerza. Voy a tener que seguir probando.
No sé. Capaz que la cagué en dejar que me vendan un café medio suave, porque el flaco me dijo "este otro, Sumatra, es un poco más fuerte". Y yo dije, nah, dame ese Brasil nomas, que cualquiera de acá va a estar perfecto porque yo vengo de tomar cualquier mugre.
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